20/06/201102/10/2011
Viñetas en el frente
En enero de 1937, Pablo Picasso empezó a trabajar en Sueño y mentira de Franco, dos planchas con ilustraciones contra el levantamiento militar de julio de 1936 destinadas a obtener fondos para la causa republicana con la venta de las impresiones en el pabellón de la República en la Exposición Internacional de París. Cada plancha contenía 9 viñetas, dispuestas en un formato que recuerda a las aleluyas y a las tiras cómicas, en las que Pablo Picasso caricaturizaba aspectos como la violencia, la destrucción del arte, las consecuencias del totalitarismo, el enfrentamiento y el drama de los inocentes, con un lenguaje en el que lo vanguardista y lo popular se mezclan al servicio de la denuncia de la barbarie de la guerra.
Las planchas fueron finalizadas en junio de ese mismo año. Entre las primeras viñetas y las últimas, la sátira y la parodia giran hacia la representación de la crudeza del drama de la guerra, viñetas en las que el espectador reconoce la iconografía de una de las grandes obras maestras de Picasso, Guernica, que el artista había comenzado ese mismo mes de mayo para exponerla en el pabellón de la República en la Exposición Internacional de París.
Sueño y mentira de Franco fue el punto de partida de Viñetas en el frente, que se centró en mostrar los resultados de un análisis iconográfico comparativo de estos dos grabados. La exposición incluyó asimismo las planchas originales que sirvieron luego para imprimirlos y, alrededor de esta pieza central, reunió cerca de 110 obras y documentos tanto de Pablo Picasso como de otros artistas con los que el andaluz compartió, ante la tragedia del conflicto bélico, recursos gráficos y visuales en la búsqueda del impacto emocional. Entre éstos, los grabados de Los desastres de la guerra de Goya –que el Gobierno de la República reeditó en 1937—, los dibujos del salvadoreño Toño Salazar, los fotomontajes de John Heartfield, las composiciones gráficas de Josep Renau y Mauricio Amster, las caricaturas de Luis Bagaria y George Grosz.
El ejemplar de Sueño y mentira de Franco expuesto forma parte de la Colección del Museo Picasso Málaga, que lo adquirió en enero del año 2010. El origen del resto de las obras es diverso, pues provinieron de colecciones públicas y privadas tanto nacionales como internacionales. Entre las primeras, cabía destacar el Museu Picasso de Barcelona, el Institut Valencià d’Art Modern, el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, el Museo Nacional d’Art de Catalunya, el Museum Ludwing de Colonia o el Museo de Arte de El Salvador.
La exposición fue comisariada por Inocente Soto Calzado, profesor de dibujo; Salvador Haro González, profesor de Bellas Artes de la Universidad de Málaga; y Claustre Rafart i Planas, comisaria en el Museu Picasso, Barcelona.
Con motivo de la exposición, se editó una publicación en castellano, inglés y catalán en la que colaboraron con ensayos Miriam Margarita Basilio, Salvador Haro, Carlos Pérez, Claustre Rafart e Inocente Soto.
Concebida por el Museu Picasso de Barcelona, y coproducida por el Museu Picasso de Barcelona y el Museo Picasso Málaga.